«Las futuras emprendedoras deberían saber cuáles son sus objetivos antes de iniciar un negocio. Estos incluyen: ¿Quieres ganar dinero? ¿Ser conocida? ¿Ayudar a la gente? ¿Realizar un servicio único o muy necesario?», son algunas de las preguntas que se hicieron en una conferencia sobre cómo las mujeres aprenden a iniciar un negocio.
El camino para convertirse en una mujer emprendedora está lleno de desafíos, pero también de grandes oportunidades. Implica tener una visión clara, la determinación de hacerla realidad y la habilidad de transformar una idea en un proyecto exitoso.
El emprendimiento no se trata solo de iniciar un negocio, sino de liderar con pasión, gestionar recursos y aprender continuamente para enfrentar los retos. Ser una mujer emprendedora implica asumir riesgos y encontrar soluciones innovadoras en un mundo empresarial competitivo.
Qué significa ser una mujer emprendedora
Ser una mujer emprendedora significa asumir un rol activo en la creación y gestión de proyectos o negocios, con el propósito de generar valor y éxito. Este concepto implica independencia, toma de decisiones estratégicas y la capacidad de liderar a equipos o proyectos.
Las mujeres emprendedoras también se distinguen por su capacidad de identificar oportunidades de negocio, por su resiliencia frente a los obstáculos y por su espíritu innovador, características asociadas a una mujer empoderada. En un contexto global, están abriendo nuevas puertas y creando impacto en diversas industrias.
También es una realidad que las mujeres emprendedoras se enfrentan a desafíos únicos que sus homólogos masculinos no enfrentan en su búsqueda del éxito empresarial.como son:
- Los roles de género asignados a las mujeres, la socialización de las mujeres para el conformismo, para el no emprendimiento…que incide en la confianza que ellas mismas tienen -y que se requiere de su entorno- a la hora de emprender y alejadas de las cualidades de una mujer empoderada.
- El acceso desigual al capital, que podría significar la diferencia entre el éxito o el fracaso para algunas empresas propiedad de mujeres.
- La desigualdad de género, que implica por ejemplo seguir asumiendo el rol de cuidadoras con sus consecuencias en estrés laboral, en una desigual gestión del tiempo y la asunción de múltiples roles.
Por el contrario, cuando las mujeres impulsan su desarrollo personal y realizan procesos de empoderamiento, trabajan habilidades como la capacidad de iniciativa, el liderazgo, la autoestima laboral, consiguen confíar más en su propio criterio para tomar decisiones y en sus competencias, mejorando su posicionamiento profesional y fortaleciendo sus emprendimientos.
Características de una mujer de negocios
Las mujeres de negocios suelen compartir características clave que las diferencian y les permiten sobresalir en el ámbito empresarial. Entre las más importantes están:
- Visión estratégica: Capacidad para planificar a largo plazo, visualizando el crecimiento y las oportunidades del negocio.
- Confianza en sí mismas: La confianza en una misma, su empoderamiento personal, es probablemente el rasgo más importante que posee cualquier emprendedora exitosa. Si no crees que puedes tener éxito, no llegarás muy lejos.Creer en sus habilidades y decisiones, proyectando seguridad en cada aspecto de su trabajo.
- Ambición. Para tener éxito, hay que desear algo de verdad. Esforzarse siempre por avanzar apuntando hacia lo más alto. ¿Qué nos lo impide?
- Capacidad de liderazgo: Ser capaz de motivar, guiar y gestionar equipos de trabajo eficientemente y auto-liderazgo para gobernarse a una misma y sus objetivos.
- Adaptabilidad: El mundo de los negocios es dinámico y requiere la habilidad de adaptarse a los cambios aportando con flexibilidad soluciones adaptadas.
- Red de contactos: Las mujeres empresarias saben la importancia de construir relaciones profesionales para su crecimiento personal y de su empresa, el aislamiento es un riesgo que acecha a las emprendedoras dadas a buscar por si mismas las soluciones a sus desafíos.
Mejores cualidades de una mujer empresaria
Las mejores cualidades de una mujer empresaria son aquellas que le permiten afrontar los desafíos del mundo empresarial con éxito y convertirlos en oportunidades. Entre las cualidades más destacadas están:
- Resiliencia: La capacidad de recuperarse de fracasos y dificultades, sin perder el enfoque.
- Creatividad: Las mujeres empresarias exitosas son capaces de innovar y encontrar nuevas formas de hacer las cosas.
- Comunicación eficaz: La habilidad para transmitir ideas claras y motivar a otros es crucial.
- Pasión por su proyecto: Tienen una fuerte convicción y compromiso con su negocio, lo que la impulsa a seguir adelante incluso en momentos difíciles.
- Gestión del tiempo y recursos: La organización y priorización de tareas son esenciales para garantizar la eficiencia en el trabajo diario.
El camino del emprendimiento y los negocios requiere no solo conocimientos, sino también habilidades blandas que permiten a una mujer destacarse y llevar a cabo sus proyectos con éxito. Con estas cualidades, muchas mujeres están liderando sectores y logrando grandes cambios.
En todo caso….si paramos un momento, y miramos atrás….